Leandro Hernández
Conocí a la licenciada Irene Scarlatta por su relación con NMG. Entonces poseía un estado interno bastante desordenado el cual percibía sin mucho remedio. Lo cierto es que gracias a su asistencia (y con el tiempo) pude ir tejiendo (o más bien recomponiendo) lazos con el mundo externo haciéndose más fuertes y más regios logrando así una mejoría notable en cuanto a una patología antisocial bastante profunda y acentuada.
Una terapeuta con los pies en la tierra. Extensa experiencia clínica y un abanico de herramientas vasto. Ya no hago terapia. El rédito de esos años es más que positivo. Nunca dispondré de la suficiente gratitud para retribuirle su tan buena obra.