Flor Calvo
Conocí a Irene en el año 2005. Recuerdo ese año como uno de los más intensos y difíciles de mi vida. Primero fui paciente suya y luego alumna de Reiki, Numerología y Flores de Bach. Permanecí como paciente a lo largo de casi 10 años. Acompañó mi proceso con honestidad, humor y afecto. Muchos de mis logros tienen que ver con todo el trabajo desarrollado a su lado. La calidad humana, la sabiduría pero por sobre todo, su coherencia y grandeza, hacen que tenga un lugar en mi corazón eternamente. ¡Gracias, compañera de camino!